
concepto
Alejandra comenzo experimentando con música tradicional de las costas de Guerrero, Oaxaca y Veracruz, fusionando rítmos y géneros de otras partes del mundo como el reggae, la rumba, el danzón, el jazz, la música clasica, el hip-hop, la bachata, el lando, la música andina, la salsa, la cumbia y sonoridades balcánicas, siempre abierta a nuevas posibilidades y a perder el temor al purismo.
Acualmente Alejandra trabaja en su cuarto disco, en donde el mambo, la cumbia, la rumba, el son cubano, el bolero y la salsa son los invitados de honor. Este es el reto más grande que Alejandra ha tenido en su carrera musical, ya que como ella misma comenta: "No hay nada ni nadie que pueda superar el trabajo de músicos y cantantes como Celia Cruz, Miguelito Valdéz, Daniel Santos, Pérez Prado, Benny Moré, o Héctor Lavoe"... "Vocalmente es el reto más grande mi vida, pero prefiero afrontarlo a vivir sin intentarlo"... ¿Es atrevido? ¡Si lo es! "Pero es como tener frente a mí el paraíso y no meterse en el". ¡Haré mi mejor lucha! ¡¡¡La Sonora Morena se esta cocinando!!!.
Los Adoradores del espíritu de la fusión y la experimentación, escucharán en sus conciertos además de alegría, un festejo de pasión, amor y admiración por la costa negra de México y por la música bailable de Latinoamérica.
La técnica que utiliza en su voz, va desde la operística hasta la tradicional, con un balance de ambas posibilidades, haciéndolo más variado, y encontrando gran riqueza de colores en las interpretaciones que ofrece al público. Alejandra canta lo que pasa en su comunidad y en su contexto, con su inusual registro vocal, alcanzando 2 octavas y media. Así pues, su rango vocal abarca desde soprano dramático hasta los graves de una contra-alto, con pleno dominio y comodidad en todos los registros, lo cual le da la oportunidad de incursionar también en otros géneros populares.